El regreso de Lisabö, el Kendrick Lamar polaco, Tim Burton contra la IA...
y otras noticias con las que ponerse al día
¡Valladolid, buenos días!
Ayer hubo tier, no podéis quedaros sin saber qué hay que pensar de los discos de la semana, ordenados en cómodo ranking:
Un anuncio que mola
Y otro que es una mierda
Nada lo resume mejor que:
La tele polaca es una cosa
Si os parece un horror Tu cara me suena, esperad a saber que se celebra también en otros países. Como Polonia, que ha traído al cantante Kuba Szmajkowski a concursar, y no se le ocurre mejor idea que salir a imitar a Kendrick Lamar. Ganó el programa ese día, pero un precio muy alto que nuestros ojos deben pagar.
En el resto del mundo, esto ha causado comprensible escándalo. Szmajkowski, que no es precisamente negro, se tuvo que aplicar maquillaje para parecerlo (el famoso “blackface”) y no titubeo demasiado a la hora de pronunciar todos los “n-word” que tiene ‘Humble’ (algo sobre lo que el propio Lamar ya reprendió a una chavala). En Polonia esto fue un domingo cualquiera, donde se apreciarían hitazos como:
Meme de Spider-Man cinematográfico
Pasatiempo cinéfilo para una mañana de miércoles: localizar en qué película de los últimos 15 años Tim Burton se dejó reemplazar por una IA.
La importancia de los residuales
Que actores y guionistas estén reclamando, entre muchas cosas, una mejora en el pago de residuales del streaming no es una cuestión menor. Muchos trabajadores han dependido de esta clase de pagos para sostenerse en vacas flacas, derivados de la posterior vida que películas o series han vivido a través de reemisiones, de cable o de ventas en formato doméstico como alquiler o DVD. Incluso aunque el producto en cuestión pueda ser una birria, puede seguir dando dinero, como pasa con Street Fighter: la última batalla.
Que Capcom esté ya mirando una nueva adaptación del videojuego de lucha (esta vez con los RackaRacka, los autores del éxito Háblame) en síntoma de que la industria del videojuego está viendo el cine como un buen mercado secundario. Aunque no es la primera vez, ya que hubo toda una ola de adaptaciones que en su mayoría fueron masacradas por crítica y público, aunque lograsen ser en ocasiones financieramente viables, como la película con Jean-Claude Van Damme.
Aun así, Street Fighter: la última batalla sería un claro caso de película que ya ni existe. Al contrario que Mortal Kombat, no tiene detrás a un director de culto (los clásicos de Steven E. de Souza le tienen como guionista) y no es recordada con cariño por su estrella. Y, aun así, Capcom saca pecho de ella en sus declaraciones de resultados porque genera casi medio millón en ingresos al año. Así que no os preocupeis si esa película que os mola ha fracasado en taquilla, porque eventualmente va a terminar dando dinero. Al menos a los peces gordos.
Y ya que mencionamos la película, rescatemos una de las mejores anécdotas: Van Damme gastando 10.000 dólares a la semana en cocaína y el director teniendo que reescribir escenas para grabarlas con otro actor porque iba tan pasado que ni iba a rodar.
Pausa de minutos musicales
El sube y baja hipersónico
Thundercat hace una canción para Listerine usando ruidos de enjuague bucal. Vamos a decir que 👍. Cepillo Eléctrico Oral B ya espera su turno, parece que quieren que sea con Autechre.
¿👍? Nickelback, al borde de editar lo mejor (lo único) de su carrera.
("Valladolid, buenos días" es una canción de El Niño Gusano. También es una sección de actualidad de Hipersónica. En 15 minutos, estarás al día de lo relevante en nuestro terreno. Cada lunes, miércoles y viernes en tu buzón de correo o en la web de Hipersónica.)