Liner Notes #5: Suede — Suede: tan jóvenes y tan colgados
Lo que pasa cuando no has nacido siendo Angie Bowie
Cuando en marzo de 1993 se lanzó Suede, el debut homónimo de la banda de Bernard Butler y Brett Anderson, los semanarios musicales británicos le dieron con ganas a la maquina del hype. Por supuesto, sus engranajes sirvieron para dar a conocer al mundo al grupo, pero también un gran obstáculo que inmediatamente les puso en el ojo del huracán.
Contribuían ellos poco a bajar el soufflé, con apariciones en prensa estelares. De hecho, ayudados por las declaraciones del siempre demasiado hablador Brett, uno de los primeros en querer sacarles los colores fue Morrissey:
“Suede son un grupo con los puntos de referencias tan bien ajustados que, en consecuencia, no hay espacio en ellos para la más mínima originalidad. Y a pesar de lo que cuenta, nunca he estado con Brett ni tan siquiera me gustaría hacerlo: parece un jovencito profundamente soporífero (…) Creo que lo que le pasa es que nunca perdonará a Dios por no haberle hecho nacer siendo Angie Bowie”.
En apenas cuatro líneas, Mozz consolidaba los reproches de muchos hacia Suede. A saber: copiones, aburridos, demasiado prendados de Bowie, poco sutiles en su ambigüedad, liderados por el cargante Brett… Así se veía al grupo entre sus detractores.