Tier list de cine y series de abril: arqueología, civilizaciones caídas, acosadores, Aitana en Netflix...
Tier list de cine y series de abril: arqueología, civilizaciones caídas, acosadores, Aitana en Netflix...
Las series y películas del mes, ordenados en ranking para que no tengas que pensar
Hi, personicas. Otro mes más con cosas que hemos ido viendo en el último mes y hemos adorado u odiado, según se nos haya dado esa tarde. Tenemos autorazos, series que llegan a su fin, miniseries llamativas y también un Roman Polanski. Lo damos corto, lo damos fino.1
EXCEL
Civil War
La película que más se ha colocado en el centro de la polémica que, al mismo tiempo, no resulta tan controvertida por su contenido. Alex Garland lleva sus obsesiones nihilistas al género bélico, explorando el inevitable declive cuando la sociedad se encierra en cámaras de eco. Y decide hacerlo desde una ambigüedad que no tiene interés en procesos o caldos de cultivo para la polarización, sino en las consecuencias de la inacción o tratar lo trágico con distancia.
Garland crea aquí su mayor obra en cuanto a escala, pero no renuncia a seguir a un grupo concreto de personajes de diferentes perspectivas que sabe retratar mediante acciones (aunque de cuando en cuando caiga en la exposición). Momentos de terror mucho mejor conseguidos que en Men, de la que se logra reponer con un poderío que le devuelve a la categoría de directores más interesantes de la década.
En cines.
La quimera
Pocos cineastas han hecho tanto por conectar el pasado de Italia con la realidad social del presente como Alice Rohrwatcher con su habilidad para explorarlo todo desde un realismo mágico. Aquí hace su propia aventura arqueológica, dotada de mucho menos épica que un Indiana Jones pero con montajes a ritmo de Kraftwerk. Una historia lleno de personajes y personas, de maravilloso tono de fábula y también espacios emocionales amplios donde es capaz uno de meterse sin demasiado esfuerzo.
En cines.
La primera profecía
Resulta increíble que Disney se haya convertido en los últimos años en la casa del terror comercial con más capacidad de ser ambicioso y sorprender contra pronóstico. Empty Man, Barbarian y ahora una precuela de un clásico que nadie pedía conforman una tripleta alucinante llevada por cineastas nuevos con enfoques interesantes en el género.
Arkasha Stevenson puede sentirse orgullosa no sólo de hacer una de las películas más bellas en lo que llevamos de año2, sino que da empaque y contenido al fin al regenerado subgénero de terror de monjas y conventos, empleando fabulosas influencias de body horror en el proceso. Aplausos también para Nell Tiger Free, tiene uno de los momentos de interpretación física más alucinantes y van a pasar años hasta que se le reconozca debidamente. Ojito al futuro que pueda tener como musa de terror.
En cines.
Larry David (Curb Your Enthusiasm) (S12)
Hacer una serie sobre nada, y volverla uno de los mayores fenómenos de la historia de la televisión. Volver años después y hacer otra serie sobre nada. Dejarla de repente porque sí. No hacer nada durante años. Regresar con esta última serie porque le apetece. Terminarla unos años después de manera definitiva. ¿Y qué se aprende de todo esto? Aparentemente nada.
Las improvisaciones de Larry David siempre van a dar mejores o peores resultados de manera impredecible, sus desbarres a ver donde está el límite siempre van a tocar algún límite para más de uno. Aun así, ha decidido despedirse no sólo fiel a su esencia, sino también remarcando que siempre tuvo razón, sobre todo con el final que no pareció gustar a nadie. Al menos, esta vez estábamos más listos para que nos diera ese final.
Ripley (Miniserie)
Es posible que Netflix la comprase porque un remake de una clásica película en clave prestige miniseries termina dando números y luego papeletas para los Emmy. Pero lo que no esperábamos es que hubiese adquirido la serie menos algorítmica de su historia reciente y la mejor sucesora de Better Call Saul en su melancólica pero perversamente divertida exploración del criminal.
Steven Zaillian toma decisiones interesantes que le salen redondas hasta por accidente, incluso esos momentos en círculos donde sigue los intentos patéticos de su protagonista por cubrir sus huellas o mantener su máscara. El blanco y negro es preciosísimo, y va de perlas para esa sutil capa de melancolía que no es tan protagonista como cabría esperar, resaltando un humor negro exquisito que sirve para perforar profundo un personaje que Andrew Scott (menudo añazo) tiene medidísimo en todo, desde su carácter aspiracional a sus represiones.
Such Brave Girls (S01)
En un rato hablaremos de otra comedia que intenta tener, al mismo tiempo, un pie en la sátira más enloquecida y otro en una marcada emocionalidad femenina. Kat Sadler, que crea, escribe y protagoniza esta serie británica, intenta algo parecido, pero llevado al terreno más chungo posible. Su trío protagonista es la Santísima Trinidad de la toxicidad estimulada por un sistema donde las mujeres se niegan a sí mismas para complacer a hombres que no tienen verdadero interés en ellas.
Sadler lleva la incomodidad de temas como la salud mental, la sexualidad o la precariedad hacia una tragicomedia llena de fascinante mala baba. Es siniestra hasta lo divertido, incorrecta en una manera afortunadamente femenina y bastante auténtica en lo que trata de contar a partir de exageraciones de lo que podrían ser comportamientos habituales que tengas al lado de tu casa. Vamos, mucho más que apreciable, es un cuchillo bien tirado.
SÍ
Beyond Utopia
Un vistazo a las escapadas de Corea del Norte más interesante en su faceta de docuthriller que por análisis político esmerado y perspicaz de la situación existente. Un puñetazo a las entrañas emocionales del espectador con el que hacer una sesión doble con la más brillante y escalofriante Under the Sun.
Fallout (S01)
Un nuevo caso donde no atarse en exceso al lore de los videojuegos puede dar una adaptación, al menos, divertida de seguir. Jonathan Nolan se aprovecha de los juegos de Bethesda para hacer su propia continuación a la Oppenheimer de su hermano, explorando el post-apocalipsis desde la represión, el caos y el más inesperado sentido del humor. Termina siendo desigual porque tiene una exasperante necesidad de hacer capítulos de más de una hora, pero consigue al fin una serie que no se ve como si estuvieras haciendo deberes.
Girls5eva (S03)
Aquí técnicamente no notaríamos la diferencia dado que siempre se ha visto en Netflix, pero esta tercera temporada de esta fabulosamente chorra comedia con sello Tina Fey es la primera que se produce aquí. Y se nota en un montón de referencias ligeramente forzadas a sus grandes éxitos, además de un número reducido de episodios.
Pero qué narices, siguen teniendo chistes y/o canciones absurdas que entran como un tiro. La estructura de viaje por el país permite evolucionar a los personajes y siguen encontrando maneras de cruzarlos con buenos resultados. Tiene el punto de la Tina Fey actual, que trata de trazar una línea entre la sátira más chorra y el sentimentalismo ganando. Que haga un montón de números de audiencia inventados y sigan haciendo un par de temporadas más.
Monkey Man
Resulta evidente en sus limitaciones, empezando por un midpoint en el segundo acto donde el ritmo se resiente, recreándose demasiado en explicar el pasado de su enigmático protagonista y unas circunstancias políticas probablemente editadas con respecto a las intenciones originales.
Pero leñe, que espectacular resulta en su inicio y en su clímax, donde se lanza de lleno a una violencia bestial propia del cine de acción indonesio más que del referenciado John Wick. Las peleas y todo lo físico que rueda Dev Patel están diseñadas para que todo avance visualmente, siendo capaz de narrar con la elegancia vibrante de una película muda. Si fuera así todo el rato, sería un EXCEL loco.
En cines.
Sangre en los labios
Uno de los casos donde se puede decir que estamos ante una película de los Coen con esteroides y no se resulta enteramente por hacer la broma. Neo-noir medio western en la América profunda con amores imposibles entre gente disfuncional y crímenes destinados a salir mal, además de personajes llevados con cinismo al absurdo. Sus bandazos sin duda se disfrutan más en compañía de gente igual de sorprendida por los mismos, y que se ríe en los momentos que toca.
En cines.
OK
Girls State
Continuación del fabuloso documental de Boys State, también estrenado por Apple en un momento quizá más pertinente para ir mostrando los deplorables caminos de la política y ese concepto absolutamente aborrecible que son las juventudes de los partidos políticos. Aquí resulta más evidente en sus intenciones, marcadas por disparidades y techos de cristal, pero vuelven a hacer un trabajo para quitarse el sombrero a la hora de seleccionar y seguir a un grupo de protagonistas, incluso aunque una pueda ser especialmente cargante por todas las veces que repite que es conservadora (quizá sea la idea, pero aun así).
Mi reno de peluche (Miniserie)
Que una serie como esta sea tan fenómeno que hasta probablemente tus padres la hayan visto al salirles en el menú principal de Netflix es increíble hasta cierto punto. Una tragicomedia en clave thriller y más drama que comedia, donde el abuso y el autoodio se convierten en una espiral de la que es difícil escapar, con un creador que se pone en el centro para intentar mirar frente a frente al espectador.
Hay sin duda una interesante valentía que debería compensar algunas decisiones de algoritmo en cuanto a lo visual y a momentos claves donde se expone todo el subtexto para que sea más compartible por redes. Al mismo tiempo, es difícil no sentir cierta distancia ante la promesa de un narrador no fiable que no para de pedir simpatía de manera involuntaria, o que sus intentos de mostrar su impacto en otras personas se quedan algo huecos cuando los personajes a su alrededor no tienen más desarrollo que el de servir a su historia.
Hay logros, pero también ciertas contradicciones que no se están comentando lo bastante entre tantos halagos.
MEH
Matusalén
Frank T mejor actor secundario en los próximos Goyas.
En cines.
Rabos: El musical
Por supuesto que quieres estar a bordo de todo lo que intenta proponer esta majadería de glorioso título. La lástima es que lo más gracioso que tiene es eso, el título. El resto se nota que está muy encantada de conocer a su propio ingenio.
En cines.
The Beast (La bestia)
Un intento de épica romántica desde la ciencia ficción a lo El atlas de las nubes, pero con aires sugerentes y enigmáticos que miran a Lynch. No se le puede negar a Bertrand Bonello el atrevimiento y las ganas de provocar, especialmente cuando el mejor tramo de la película es uno que entra peligrosamente en la redención de los incels, pero su desigual (falsa) antología resta fuerza a una serie de interesantes ideas sobre las relaciones y el destino en una era de pulcritud estéril.
En cines.
NO
Abigail
Una premisa muy resultona para el home invasión y las películas de vampiros que no para de ponerse palos entre los radios de su propia bicicleta. Pasa mucho rato intentando aparentar ser un who-dunnit que carece de gracia porque ya sabemos qué venimos a ver, y los pocos ratos de humor y gore no compensan caer en las tendencias más perezosas del cine de terror mainstream moderno.
En cines.
El caso Sancho
Maten el true crime.
En HBO Max (si no lo han quitado por vergüenza).
The Palace
Estabais todos deseando ver la versión de Roman Polanski de El triángulo de la tristeza, segurísimo.
En cines.
Pared con pared
[n.d.e.]: la tier se terminó y se programo antes de llegar a ver Rivales de Guadagnino o El especialista con Ryan Gosling, por si las echabais en falta. Y si no es el caso, deberíais.
Doble mérito en un género que tiende a oscurecer todo.