El balance artístico del Sónar, los públicos de mierda, Beyoncé poniendo al rojo vivo la economía...
...y otras noticias con las que ponerse al día
¡Valladolid, buenos días!
Os dejamos la foto de la tier y ya si eso os metéis a leerla. Es mejor que pensar. Pero no es mejor que el queso:
La crónica del Sónar
Ferraia ha estado tan, ejem, lúcido durante el festival que hemos tenido que sacar su crónica en post aparte. Por no inundar vuestros mails, aquí os la dejamos:
Protestas por la programación del O Son
Son clásicas las sentadas como forma de protesta, así que imaginamos que esa es la motivación detrás de la estampa que ha dominado el último O Son do Camiño, con chavales pasando olímpicamente o directamente sentados a sus cosas mientras los grupos que tocaban en el escenario doble. Todo para hacer tiempo hasta que tocase Aitana o cualquier otro artista tocho que fuese realmente lo que querían ver.
Imágenes que empañan un rato la imagen de festival referente que quieren dar y que evidencia el sinsentido en que se han convertido los carteles de esta clase de eventos. Cuando la división de escenarios es menos clara, como pasa aquí con un gran escenario partido en dos para que no haya ni que mover el culo, vas a toparte con estas estampas ante públicos muy diferenciados queriendo plantar bandera para ver al grupo que les interesa.
Y bueno, que son chavales, que camelen como ellos camelan, aunque para los artistas no es algo que haga mucha gracia. Así que igual mejor desmontar esto de intentar captar a todos los públicos con carteles que, además de clónicos, están carentes de un mínimo de curación. O mejor aun, nos podemos cargar todos estos festivales e intentamos recuperar las salas.
La culpa de la inflación es de Beyoncé
Está toda Europa de cabeza con la inflación de los precios, mayormente atribuida al impacto de la invasión a Ucrania. Aunque Suecia prefiere ir un poco a la vanguardia, echando la culpa de los males de la economía a… Beyoncé.
Gente como Michael Grahn, jefe de economía del Dankse Bank, comentó los datos de la inflación en el país durante el mes de mayo, que subieron un 9,7% con respecto al año previo aunque es una mejora con respecto al 10,5% de abril y también la primera vez en meses que se baja del 10%. Y podría haber sido mejor aún si la cantante no se hubiera pasado por allí.
El comienzo de su gira en Estocolmo habría incrementado el coste de terminados bienes y servicios, como “visitas a hoteles y restaurantes, servicios recreativos y ropa”. Decenas de viajeros fueron a ver el concierto aprovechando las entradas más económicas.
Pero su estancia en la zona escandinava habría afectado en “0,2 o 0,3” puntos el dato de la inflación, por llenar los hoteles. También explicaría cierto aumento del coste de las entradas. Para junio, ya que al fin se ha marchado, ya debería volver todo a la normalidad, dice Grahn.
No des bola a idiotas
A los subnormales en Twitter no se les cita, a los pesaos del “debate me” se les ignora. Es algo que se está comentando últimamente después de que Joe Rogan le diese bola al último idiota antivacunas, con varios médicos señalando su irresponsabilidad y este pidiendo discutir en el “marketplace of ideas” (y mandando sus trolls cuando le ignoran). Y es algo sobre lo que Steve Albini ha reflexionado usando el caso de Judas Priest y su juicio por letras satánicas.
Contexto: un grupo de paranoicos temerosos de dios empezaron a acusar a grupos de metal de esconder mensajes satánicos en su música que sólo se podían oir reproduciendo el disco al revés [sic]. Aunque daba igual cómo se reprodujesen, que el mensaje pagano se transmitía, y los ligaron con suicidios adolescentes o comportamientos extremos propios de secta. Sin tener nada en absoluto que lo demostrase.
Básicamente porque era imposible de demostrar. Como explica Albini, meter mensajes ocultos es laborioso, y es difícil de ocultar, así que es tan sencillo como observar la cinta original para comprobar si hay o no mensajes. Judas Priest lo hicieron cuando fueron llevados a juicio por el tema, y decidieron combatirlo. Pusieron las cintas, ofrecieron documentación a rabiar, llevaron a su técnico a explicar electromagnetismo.
Pero, como dice Albini, de nada vale intentar enseñar a gente que no quiere aprender o no confía en ti. Y aunque demostraron que no había mensajes secretos en su música y que era absurdo ponerse a buscarlos, toda esta gente seguía señalando canciones o grupos. Porque daba igual que los Judas no tuvieran mensajes, igual están en otro lado. O incluso hay un método ultraenrevesado para ocultar el mensaje. La estupidez es infatigable, y juega con eso para cansarte a ti.
Hablando de idiotas
Señores que aún se piensan que una mujer en la música sólo puede ser familia de los grupos: do the evolution, baby. Pasa continuamente y hace décadas que debería haber dejado de ocurrir.
Pausa de minutos cinéfilos
El sube baja hipersónico
👎 Teresa Taylor de los Butthole Surfers.
👎 Equilibristas que beben cerveza.
👎 Swifties en el Primavera, pero 👍 grupos que fuesen a tocar en Mordor, se libran de ver filas de gente sentada.
👍 Luca Guadagnino y Zendaya, porque vaya fiesta el tráiler de Challengers.
("Valladolid, buenos días" es una canción de El Niño Gusano. También es una sección de actualidad de Hipersónica. En 15 minutos, estarás al día de lo relevante en nuestro terreno. Cada lunes, miércoles y viernes en tu buzón de correo o en la web de Hipersónica.)