Los precios de Pearl Jam, el gallito de Alicia Keys, la portada de Estopa...
Los precios de Pearl Jam, el gallito de Alicia Keys, la portada de Estopa...
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¡Valladolid, buenos días!
Cuando a Pearl Jam no le gustaba que pagases 140 napos por un concierto
Intenta morir siendo un héroe, pero como sigas viviendo puedes terminar convertido en el villano. Pearl Jam han causado un entendible alboroto por el precio de sus entradas para sus actuaciones en Barcelona. 140 sin contar gastos para verlos en pistas, y la más barata no baja de 100 euros. Algo muy indignante teniendo en cuenta su pasado.
La banda de Seattle vivía un momento dulce en 1994, siendo uno de los grupos más exitosos de su escena y todavía no devorados por dicho éxito. Es por lo que decidieron aprovechar su salto para hacer el bien, controlando el precio de sus entradas para que fueran asequibles para los fans. Pero Ticketmaster no tenía tanto interés en su buena fe, y sobrecargaba de gastos de gestión entradas con un tope de 18 dólares, algo que se podía permitir porque había comprado a su competencia y tenía exclusividad con la mayoría de los recintos notables para hacer conciertos.
Pearl Jam buscaron los huecos para sortear el monopolio, buscando espacios abiertos donde tocar y organizando algunos conciertos como benéficos, ya que algunos recintos permitían a organizaciones sin ánimo de lucro marcar el precio ya que lo permitía el acuerdo con Ticketmaster. Pero claro, intentar hacer eso todo el rato cuando estás creciendo a nivel nacional es una pesadilla a nivel logístico, no era sostenible.
El grupo terminó cancelando la gira y lanzó su ofensiva contra la empresa ticketera. El asunto se volvió de interés nacional, con muchos periodistas exponiendo las prácticas monopolísticas, y la compañía fue investigada por la Cámara de Representantes de Estados Unidos. En una de las audiencias intervinieron los miembros de Pearl Jam, Stone Gossard y Jeff Ament, sumándose a las voces afectadas por Ticketmaster. Fue especialmente notable su aparición ya que el grupo había cercenado otro tipo de apariciones públicas, negándose a hacer prensa y grabar vídeos musicales a pesar de las consecuencias (que tampoco fueron tantas, estaban al alza).
El grupo sirvió también de altavoz para otros músicos afectados, incluyendo a Neil Yong, R.E.M., Aerosmith (Steven Tyler fue citado diciendo que “Puede que Mussolini hiciera que los trenes funcionaran a su hora, pero no todo el mundo podía conseguir un asiento en ese tren”), etc.
La jugada tuvo impacto limitado. Ticketmaster debía ser más transparente con sus tasas, pero no se les pusieron especiales límites. Mientras tanto Pearl Jam entraron en un momento convulso, con su batería Dave Abbruzzese marchándose por estar en desacuerdo con llevar esta batalla pública y con su siguiente disco, Vitalogy, funcionando menos de lo esperado. Ahora, en 2024, ya no están para guerras.
Y no sólo el público sangra…
En el otro lado del espectro donde se encuentra Pearl Jam está el indie español (el indie de verdad), con malabares acojonantes para no salir con pérdidas increíbles tras cada concierto. Así lo cuentan Medalla en su hilo, donde cubrir una visita a Madrid resulta una tarea titánica. Luego ves los artículos donde la industria del concierto crece y claramente te molesta comprobar hacia donde está creciendo.
The Brothers Gonna Work It Out
Barriendo bajo la alfombra de la Superbowl
La post-verdad son también cosas tan inocuas como controlar un relato de una pifia musical. Alicia Keys fue una de las invitadas ilustres en el show del descanso del Super Bowl que eclipsó al artista principal (me dicen que era Usher, pero esto no es 2004 así que no importa), y uno de los momentos destacados de su actuación fue el gallito en su voz nada más empezar.
Pero la NFL y su equipo quiere que pienses que nunca pasó. En su canal oficial subieron la actuación y la voz de Keys aparecía corregida (¿IA?) y está borrando a mansalva y a velocidad de vértigo cualquier versión original subida en formato bootleg.
Un ejemplo más de intentar correr bajo la alfombra movidas inocuas que un equipo de P&R o una empresa cree que les hace quedar mal. Ahora dí dentro de 5 años que el gallito de Alicia pasó pero no hay ninguna prueba para demostrarlo.
CallAItos estaban más guapos
Sabemos que esto no es 2001, pero Estopa son objeto de candente actualidad. El grupo, objeto de cariño revivalista tuitero como lo ha sido también Aquí no hay quien viva, ha decidido mantener el colegueo con los aficionados presentando de manera distendida la portada de su próximo disco, Estopía. Pero la jugada salió rana, la gente se revolvió contra ellos por lo que parecía indicar que habían realizado la portada con Inteligencia Artificial.
El grupo inicialmente se revolvió, defendiendo el trabajo de su diseñador de referencia desde su segundo disco, el Jandi. Fue mal remedio, no teniendo en cuenta que la comunidad ilustradora no tiene el chichi para la IA y que es objeto de frecuentes críticas por sustentar su entrenamiento en trabajo que tiene propiedad intelectual. Jandi uso la IA para la base de la imagen, pero luego realizó el trabajo manual para el resultado final.
Estopa emitieron el comunicado final donde se disculpan y prometen aprender para el futuro. Un paso muy en falso para un disco que ya venía anunciado con comunicado realizado con ChatGPT, quizá anticipando que la tecnología va a tener un papel relevante en su contenido. Igual ahora lo tenemos que considerar para la tier que toque (o al menos para ubicarlo en la nevera de donde sacamos los NOes).
Cosas que ver y escuchar este fin de semana
En la búsqueda del impulso perdido. IDLES siguen encontrando cosas que decir además de columnas de Eldiario.es en un momento donde el post-punk británico está tirando de la alfombra bajo sus pies. TANGK busca algo más vital y animado en sus adelantos, probando a llevar a la práctica aquello que enunciaba Joy as an Act of Resistance. Ojalá les salga.
Con menos que demostrar están Grandaddy, que regresan con disco nuevo donde Jason Lytle ya no tiene que reinterpretar piezas pasadas en acústico o al piano. Blu Wav nos llama tanto que casi os hacemos otro especial sobre por dónde empezar con ellos. Y hablando de comienzos…
Más discos que salen hoy:
Nada mejor para una semana de San Valentín que Sofia Coppola haciendo revisionismo de la vida matrimonial privada de Elvis Presley. Tomando las memorias de la protagonista, Priscilla aparece para ser la cara B de la peli de Baz Luhrman de hace un par de años, mirando de manera poco amable la jaula dorada en la que acabó ella.
Y bueno, qué me decís de esta joya:
Más estrenos esta semana:
En Disney+: Bobi Wine: el presidente del pueblo.
Pausa de minutos American Football
El sube-baja hipersónico
👎 Kanye West, con discos que aún saliendo siguen siendo de dudosa existencia.
("Valladolid, buenos días" es una canción de El Niño Gusano. También es una sección de actualidad de Hipersónica. En 15 minutos, estarás al día de lo relevante en nuestro terreno. Cada lunes, miércoles y viernes en tu buzón de correo o en la web de Hipersónica.)