Tier list cine y series de julio: Nicolas Cage y su cerdo, el olvido de Liam Neeson, Netflix quemando otros 200 millones
Las series y películas del mes, ordenados en ranking para que no tengas que pensar
(Hi, personicas. Seguimos de vacaciones hasta mediados de agosto, pero ya os dijimos que habíamos dejado algunas cosas preparadas o listas para recuperar. A mediados de agosto, Hipersónica volverá a su programación habitual)
Ahora, la imagen:
EXCEL
Atlanta
Hay que tenerlos muy gordos para tener una de las mejores temporadas de la televisión reciente, decidir desaparecer temporalmente y volver con un primer episodio antológico sin ninguno de los personajes principales o alguna conexión con lo anteriormente visto, más allá de lo temático y el tono. Pero el éxito de la serie de Donald Glover es su temática de explorar la compleja realidad sobre la raza en el momento actual y su tono surrealista que hace extrañamente divertido cosas realmente incómodas.
Por eso los episodios antológicos le funcionan tan bien, mejor La dimensión desconocida que muchas series que han intentado copiarla estos años, y por eso puede volver al carril principal de manera fluida. Pocos consiguen hacer tan interesante y fascinante -además de cuidadas visualmente- las cosas de las que quiere hablar sin que termine pareciendo turra tuitera. Excel claro, y Glover tiene bula papal para volver cuando lo vea conveniente sin preguntas.
Mass
Un doloroso puñetazo emocional en la boca del estómago. Mass nos habla de cómo dos familias destrozadas por un tiroteo masivo, la de una de las víctimas y la del asesino, deciden hablar. Dicho así, una película de cuatro personas hablando, no parece gran cosa. Pero lo es, porque decide hablar de cosas que duelen, de buscar explicaciones donde no las hay, de incluso desear el sufrimiento ajeno y de esa cosa tan compleja como es el perdón. Lo hace a través de dejar hacer a cuatro intérpretes que están absolutamente brillantes -casi ni parece que interpreten más allá de un par de momentos-, de una cámara bien colocada desde su aparente sencillez y un montaje brillantísimo que siempre escoge bien cuándo cortar y hacia donde. Hay que estar muy mentalizado para ver algo tan angustioso, pero es absolutamente prodigiosa.
Pig
Seguro que no esperas en absoluto que la película de "Nicolas Cage va a la caza de su cerdo secuestrado" te haga llorar, pero tiene elementos suficientes para emocionarte. A pesar de ese punto de venta, es una anti-película de venganza, más centrada en estudiar un estado de ánimo que en una trama llena de suspense o hilando secuencias potentes. Es un drama bien estudiado, que con una historia algo absurda -muy Cage, por otro lado- que tiene un poso muy triste en su sosegada exploración del duelo y la pérdida de lo que amamos -un sosiego poco Cage, que está excelente de inicio a fin-. Toda una joya.
En (unos pocos) cines.
Sólo asesinatos en el edificio
Tras ser una de las sorpresas del año pasado, la fabulosa comedia sobre asesinatos, extrañas relaciones intergeneracionales y obsesión con los podcasts regresa manteniendo fuertes sus constantes. Quizá ese continuismo se puede interpretar como algo de falta de frescura por su parte, pero el cuidado de sus personajes principales y su estupenda química, así como algunos episodios sorprendentes centrados en personajes satélite que ofrecen un retrato más complejo e interesante, hacen que mantenga perfectamente el nivel. El mejor rato de la semana (a menos que vieses Los ensayos, de la que hablaremos después cuando haya terminado).
SÍ
Encerrado con el diablo
Dentro de esa clase de thrillers "tan bien hechos que no parece que esté haciendo demasiado". Uno de esos pequeños vistazos a la boca del terror y el corazón de la oscuridad, que aprovecha bien los pilares del drama carcelario y del procedimental de investigación. Te acaba dando más fuerte de lo que esperas en ciertos puntos -a veces sin quererlo, como cada escena con el difunto Ray Liotta- y se limita a unos seis episodios para no terminar abrumando. Lo dicho, bien hecha.
Por mandato del cielo
Un notable True Detective en la América profunda y mormón, explorando cuestiones teológicas mientras es un poco "señores que montan un culto peligroso en lugar de ir a terapia". Juega bien sus armas, desde el seguimiento de la trama de investigación a los flashbacks del personaje de la víctima, expandiendo bien el drama y la intriga a lo largo de siete episodios. Al menos, mucho mejor que la mayoría de algoritmos que producen algunas de estas como churros. Ah, y Andrew Garfield pelazo.
Vortex
Gaspar Noé ha venido con disfraz de cordero, tratando de mostrar un tierno relato del amor en la senectud y la enfermedad neurodegenerativa desde la madurez y el sosiego. Y hay un autor algo más moderado, sobre todo en comparación con cosas como Irreversible, Love o Lux Æterna, pero sigue habiendo transgresión formal -esa pantalla dividida- y conducción a instantes de pesadilla angustiosa. A veces trata de llevar demasiado el relato hacia esa devastación marca de la casa, y eso hace que no aterrice del todo, pero es una fascinante película sobre la complejidad del dolor, del envejecimiento y de las drogas.
En cines.
OK
El monstruo marino
El caso de Chris Williams es el de otro más de esos animadores de Disney que buscan suerte fuera de ella para intentar con algo más atrevido y libre de lo que suelen permitir sus corsés, aunque los tengan que cambiar por otros más ligados a aspectos técnicos. Aunque El monstruo marino no parece lucir pobre visualmente, todo lo contrario. El acabado es apabullante, y el principal argumento para dar una oportunidad a su sencilla historia de aventuras y de replanteamiento de cosas que das por sentadas que, por desgracia, no da para dos horas como ella misma se cree. Pero es muy estimable, y posiblemente la última muestra del potencial que tenía el departamento de animación de Netflix para competir con los grandes.
La lista final
Pintaba a no, sobre todo porque un thriller militar muy serio con Chris Patt parece fórmula desastrosa. Pero su primer episodio entra como un tiro, con Antoine Fuqua volviendo a hacer la versión más digna y eficaz de los thrillers B o C en los que ha basado su carrera. El resto ya se le nota un poco más las fracturas y el algoritmo, pero sigue teniendo bastante la paranoia hipervigilante de un Tony Scott y la meticulosidad de una novela de Tom Clancy -aunque no adapta ninguna- para ser muy apañada.
Thor: Love and Thunder
Dada la colección de temazos de Guns N' Roses a los que recurre Taika Waititi en la película, podemos hacer una analogía clara. Su Thor: Ragnarok era su Appetite for Destruction, sorprendiendo y cargándose de jitazos directos sin miedo a quedar de hortera. Esta es su Use Your Illusion. Los dos volúmenes. Errático, quizá beneficiado de aplicarse cierta restructuración, pero también fascinante en su cambios de tono y en su aún mayor desvergüenza. En los momentos que funciona consigue llegar alto, y en ambos casos uno de esos momentos viene con 'November Rain'. Aun así, estar constantemente variando en calidad resiente la experiencia.
En cines.
MEH
El arma del engaño
Mira que ahora cualquier cosa que huela a entretenimiento adulto nos entra solo, y una de espías inglesa durante la Segunda Guerra Mundial tiene elementos para ello. Pero joder, John Madden, toda una vida haciendo cuadriculadas y sositas versiones de las películas que intenta hacer y aquí no ha hecho una excepción.
Men
Ciertamente hay más allá de lo que prometía en apariencia, que es una abierta alegoría sobre la masculinidad tóxica y el abuso contra las mujeres. Alex Garland abre el foco a través de la alusión, tirando de simbología cristiana y naturalista para poder hacer una inconclusa disertación sobre el mal causado por la humanidad a lo largo de la historia. En cierto modo, Men es su madre! aunque sin tratar de idiota a su audiencia a través de subrayar constantemente la metáfora. Garland prefiere jugar más con la abstracción, lo cuál hace frustrante muchas partes del trayecto y también lo poco desarrollado que está su personaje central que debe aterrizar sus ambiciosas ideas. Pero vale la pena verla por sus atrevidas ideas en algunas secuencias de horror folk y grotesco, especialmente un final desatado como poca veces habréis visto.
En cines.
Para toda la humanidad
Ojalá no tener una pega tan superficial y simple como que los múltiples saltos temporales que da la serie provoca que escame mucho ver a los mismos actores con cada vez más prótesis para aparentar más edad. Pero ha llegado ya a un valle inquietante que es difícil pasar por alto, y al menos a mí me ha provocado que pierda cierto interés en una carrera espacial a Marte entre dos potencias estatales y una empresa privada megalómana. Una pena, las dos anteriores temporadas tenían bastante chichilla.
NO
El agente invisible
La figura del productor intrusivo o el estudio que impone limitaciones ha sido muy vilipendiada a lo largo de la historia, y con motivo muchas veces. También es cierto que son figuras a veces necesarias para un mínimo de control de calidad, que es lo que carecen la mayoría de grandes producciones de Netflix. 200 millones para los Russo para que hagan una peli de espías clandestinos muy blandita, con humor de calorías vacías y poco o nada chunga es la definición pura de quemar billetes.
La memoria de un asesino
Ya me he olvidado de ella.
En cines.
Ms. Marvel
A cada serie que estrenan más parece una mala idea el plan de Marvel de destinar aquí sus personajes menores. Además de parecer que han hecho la prototípica película suya de dos horas en seis alargadas entregas de una hora, este añade el problema de que parece que han tenido dos ideas distintas para la serie -una de superheroina juvenil y otra de autodescubrimiento superheroico en Pakistán- y han intentado meterlas todas en una misma temporada. El problema es que, por la fórmula que deciden seguir, parecen dos partes muy diferenciadas que no terminan de casar, quedando el homenaje a la cultura musulmana y el toque adolescente muy escasos. Simplemente no tiene razón de ser, más allá de lanzar la secuela de otra película.
Persuasión
Una perezosa actualización de Jane Austen, que quiere sacar provecho de una rotura de la cuarta pared a lo Fleabag pero sin nada del interés o el divertido ingenio de esa. Por si fuera poco, su pobreza visual y su ritmo flojo la desequilibran, pareciendo casi un proyecto de serie descartado que se reformuló a película a última hora pero se quedó con los mismos recursos. Cuando decimos que muchas series de Netflix podrían ser una peli al menos lo pedimos de las que tienen un mínimo de buen gusto estético o narrativo. Casi un muy manufacturado "Te gustará si te gusta Bridgerton".