¿Creéis que esta fiebre por las grandes superficies para los conciertos, que siento que se extiende cada vez más, aunque venga de lejos, tiene algo que ver con los egos? Es decir, un mítico "mira qué grande la tengo que toco el x sitio de proporciones descomunales", o lo mismo pero por parte de las promotoras. O los festivales... Como profesional y como usuaria desde luego que la sensación es la de que se le está perdiendo el respeto a la música, a las salas, y claramente también al público, primando el poder del dinero. Que bueno, esto siempre ha sido así exceptuando algunos casos y ocasiones...
¿Creéis que esta fiebre por las grandes superficies para los conciertos, que siento que se extiende cada vez más, aunque venga de lejos, tiene algo que ver con los egos? Es decir, un mítico "mira qué grande la tengo que toco el x sitio de proporciones descomunales", o lo mismo pero por parte de las promotoras. O los festivales... Como profesional y como usuaria desde luego que la sensación es la de que se le está perdiendo el respeto a la música, a las salas, y claramente también al público, primando el poder del dinero. Que bueno, esto siempre ha sido así exceptuando algunos casos y ocasiones...
Pues a mí me vendria bien una invitación, que no me quede yo sin meterme en algo.
Enviada por DM de substack ;)