El volquete del metal #57: empieza fuerte el asunto
Los discos de metal que tienes que escuchar
Hi, personicas.
Primera entrega propiamente dicha del Volquete metalero 2024, repasando movidas de este primer mes y medio. Y qué cosas, está empezando fuerte, con algún nombre que esperábamos que deslumbrase, gente dando saltos importantes en sus nuevos discos y hasta otro gran disco prog que sale en enero. Al lío.
El disco del mes: Spectral Voice - Sparagmos
Reducirlos a esto va a sonar simplista, pero es cierto que Spectral Voice funciona a la perfección como una imagen especular de Blood Incantation, siendo grupos que sólo varían en un miembro. Donde estos últimos son marcianos, técnicos, acelerados y vivazmente vanguardistas, los primeros remarcan la densidad, la lentitud, y también aspectos tradicionales del death metal que suena más oscuro y el doom metal más monolítico, llevados a extremos devastadores donde no parece apreciarse atrevimiento. Pero lo hay, y siempre tuve la sensación de que lograban llevar mejor a cabo sus ambiciones en Spectral Voices.
Su segundo disco, Sparagmos, refuerza esa sensación con un disco aún más siniestro y denso, pero que lleva a nuevos niveles ese metal extremo ominoso. Su exploración tampoco hace prisioneros, con un sonido tan grueso y apabullante que parece que destroza cráneos y separa extremidades como el ritual al que referencia el título. Podemos contar aquí con uno de los discos de género más comentables de cara al final de año, porque Spectral Voice han superado las dimensiones y la factura de lo que ya era uno de los mejore trabajos de metal de la pasada década.
Caligula’s Horse - Charcoal Grace
Difícil entender cómo, pero enero de cada año parece reservar siempre un gran sorpresón para el metal progresivo que termina en alta consideración de cara al top. Si el año pasado nos lo dio con Riverside, este año InsideOut nos sorprende con unos Caligula’s Horse que recuperan el nivelón de sus Bloom e In Contact, ambos discos dignos de top de metal.
Si Charcoal Grace lo termina siendo será algo que dilucidaremos más tarde, pero no cabe duda de que los australianos han vuelto a dominar ese pulso para los riffs técnicos, las composiciones potentes y ambiciosas y más aspectos esperables de un disco de este género. Caligula’s Horse siempre se han marcado por un patrón bastante claro, pero siempre lo han ejecutado con deslumbrante habilidad.
Aquí lo hacen con una buena sucesión de temas largos, incluyendo una en cuatro partes donde el grupo maneja contrastes e intercala pasajes de manera exquisita. Tiene algunos temas más de single y más evidentes, que no hubiera pasado nada si se hubieran dejado fuera para dejar todo por debajo de la hora de duración. Pero los aciertos de este Charcoal Grace son tan fabulosos que se puede perdonar casi todo. Mirad Haken cómo se hace.
Ὁπλίτης - Παραμαινομένη
¿Hasta qué extremos puede llegar nuestro chino blackmetalero que escribe en griego favorito? “Arqueros” parece dispuesto a explotarlos en todos los aspectos posibles, tanto a nivel de ruido como de producción, empezando 2024 igual que terminó (y también empezó) 2023: publicando un nuevo disco de intenso y demoledor metal extremo.
Debería ser cansinísimo seguir este ritmo de música abrumadora, de nuevo tanto a nivel de caos ruidoso como de ritmo de publicación. Pero Arqueros encuentra siempre nuevos ángulos, explora vertientes diferentes de black metal que pueden dar un resultado familiar pero nunca acomodado. Si bien Παραμαινομένη se vuelve agotador con respecto a su cosecha del año pasado, su incorporación de saxos y distintos tipos de disonancias resultan lo bastante fascinantes para cerrar un poco la boca tras decir “Joder, ¿ya está éste otra vez sacando disco?”.
Mourn - Crown of Thorns
Primer trabajo de un trío californiano de doom y sludge que en media hora saca un potente ejercicio que suena a melancolía y a pozo profundo. Desde un corte inicial con tensión contenida, empieza a desplegar zarpazos esperables pero bastante acertados. Como primera toma de contacto no está mal, ojalá que de aquí vaya parriba.
SLIFT - ILION
Entrases en el grupo de los turboflipados con su anterior trabajo UMMON, o simplemente te llamase la atención, no cabía duda de que a los franceses SLIFT había que seguirlos por su potencial contribución a la escena psicodélica. Una versión más anabolizada, casi de stoner metal, de unos Osees en modo turbina, pero con también tendencias al space rock. Ahora pueden haber dado un salto que ya los haga indispensables.
ILION mantiene desde el inicio esa bravura, esa tendencia a los riffs sólidos como una bola de demolición, pero ese corte introductorio que da nombre al disco muestra crecimiento en dos direcciones distintas pero complementarias. Por un lado una faceta más muscular, presente sobre todo en las voces de corte más agresivo. Por otro ese refinamiento espacial que va evolucionando hacia una faceta más progresiva. Pero no en un progresivo ensimismado y vanagloriado en su propia técnica, sino de esa faceta que explora y descubre, que lo alambicado viene de una jam muy desinhibida, al estilo de Motorpsycho.
Así, SLIFT se pueden permitir ser todo un cañonazo, pero también hipnotizar en sus momentos de más calma. Sus improvisaciones les llevan por caminos de lo más alucinantes, con canciones más desarrolladas pero que no pierden punch o capacidad de evocación. El disco se va a más de una hora, pero no se hace pesado ni tampoco excesivamente monótono, aunque podría argumentarse que la experiencia es bastante continuada.
Pero el manejo de los contrastes, sabiendo subir y bajar en todo momento, el amplio rango de influencias que moldean y esa monstruosa manera de sonar, hacen de ILION una poderosa declaración de intenciones para una de las bandas de culto que mejor perspectiva dan para el Canela Party.
Vemod - The Deepening
Es posible que el blackgaze finalmente haya llegado al estado de normalización que probablemente le encajaba mejor que convertirse en una burbuja. Nada como un trío de noruegos para demostrarlo con un fino y cautivador ejercicio de melancolía, dando un interesante uso a las herramientas que solemos asociar al blackgaze y buscándoles nuevas direcciones posibles. Vemod ofrecen un segundo disco con bastante promesa, pero también interesantes realidades que tienen los pies en la tierra.
Vitriol - Suffer & Become
Los discos de brutal death metal suelen ser abrumadores por la tremenda densidad tocada a velocidad de vértigo, con una bola de demolición que es imposible de desmenuzar, sólo queda rendirse a su arrolladora destrucción. Es un camino que perfectamente podrían haber seguido Vitriol tras sus prometedores EPs y álbum debut, pero Suffer & Become consigue sorprender en ocasiones con pasajes de pausa, de experimentación técnica que intenta mirar al nuevo death técnico que está surgiendo, pero respondiéndoles con tremenda contundencia. Y leñe, pega muy bien.
Rhûn - Conveyance in Death
Con el nivel de refinamiento y vastedad que han ido adquiriendo Fall of Rauros, quizá no sorprenda que uno de sus frontmans, Aaron Charles, decida irse en solitario por la vía más bruta y clasicista de su black metal. Con su compañero de banda Ray Capizzo de batería de sesión, Rhûn ofrece un debut de sorpresas limitadas más allá del cambio de tercio con respecto a Fall of Rauros. Pero es efectivo, llenando Conveyance in Death de intensidad, ferocidad y riffacos extremos. Funciona más como otra cara que como proyecto de futuro, pero tenemos aquí un disco notable.
Necrowretch - Swords of Dajjal
Metal extremo suele ser el mejor contenedor cuando no queremos especificar demasiado entre death metal o black metal, porque son conceptos distintos pero que al mismo tiempo pueden tener sus fronteras divididas. Hay grupos que han sacado adelante ambos de una manera paralela en su sonido, y entre los mejores recientes están los franceses Necrowretch. Con Swords of Dajjal vuelven a sacar un disco elemental pero fiero, que golpea sin muchas contemplaciones. Satanismo for the win.
Y fuera de toda seriedad, me hace mucha gracia que haya una canción llamada “Dii Mauri”.
Andracca - To Bare the Weight of Death
La buena gente del Ministerio del ruido nos ha colocado en el radar la última referencia de Kieran Dawes, que bajo el nombre de Andracca despliega black metal con lo mejor de los clásicos y los recursos de la producción actual. To Bare the Weight of Death es buen ruido nihilista, melódico y oscuro con el que mirar el abismo un rato hasta que te devuelva la mirada.
Ithilrå - Covenant of the Blackened Woodlands
No solemos detenernos mucho en demos, somos así de morro fino. Pero ojo a este material de un señor de Chicago que el año pasado firmaba con el nombre de Sorger Ekar, porque tiene un black metal tan crudo que casi puedes notar que en el nicho donde lo gravó hay todavía cadáveres. Tremendo.