Las mejores series de 2023 (I)
Ordenados en cómodo ranking para que no tengas que usar una escalera
Ya llegó el momento, es hora de ponerse a repasar lo mejor que ha dado de sí el año. Antes de empezar con los discos, que sabemos que es lo que más esperáis, hacemos un repaso rápido al terreno de las series en un año que ha dado para descubrimientos, pero menos de lo habitual, notándose ciertas limitaciones por el parón pandémico. Miedo nos da lo que pase tras la huelga. Aquí la primera parte de una lista de 16 series buenas.
16. Barry (S04)
Bill Hader propuso terminar a lo grande con la media hora de televisión más particular con una serie de volantazos que ha dejado más división de la esperada. La parte de comedia ya se queda en meras trazas dentro de un mar de oscuridad, trauma y toxicidad que trata de socavar cualquier posibilidad de redención en un protagonista cada vez menos antihéroe y cada vez más monstruo de terror.
Mucha gente se ha quedado fuera de esta última entrega, y sus saltos al vacío en la segunda mitad no caen siempre de pie. Pero leñe, cómo ha desmontado todas las expectativas que se tenían al inicio y cómo ha revelado a Hader como un cineasta al que hay que seguir muy de cerca.
15. Samurai de ojos azules (S01)
No se le puede quitar un aura de ser "La serie de anime que veremos los que vemos poco anime de manera regular", pero tampoco se le puede negar increíble despliegue más cuidado. Visual y narrativamente. Cero algoritmo en una serie que revisiona el Japón samurai en era de invasión occidental con una perspectiva interesante, brillando especialmente en una acción alucinante que se corta poco en términos de violencia. Tiene un poco de actitud propia de cuando Tarantino quiso explorar lo samurai en Kill Bill, evidenciado con unos cuantos guiños, así que por ahí entra bien.
14. The Last of Us (S01)
No cabe duda de que la adaptación del queridísimo videojuego de Neil Druckmann quiere hacer de la fidelidad su principal baza, algo que viene realmente fácil dada la naturaleza cinemática que ya tiene el original. La factura es notable, incluso aunque a ratos se acerque demasiado a un algoritmo de HBO. Su insistencia de hacer escenas completamente idénticas a las originales expone también ciertas limitaciones.
Pero los mejores momentos, que no son pocos, vienen cuando sabe manejar la intimidad. Los momentos donde trata de plasmar el choque emocional de estar expuestos a la violencia brutal son un magnífico desarrollo de la idea que vertebra la obra original, y los desarrollos de personajes secundarios que eran originalmente puntos de paso (especialmente el episodio con los personajes de Nick Offerman y Murray Bartlett donde la serie toca techo) justifican esta serie.
Aunque el mayor problema es que no tienen suficientes escaleras.
13. Mrs. Davis (S01)
Una locura que es una bobada y una genialidad al mismo tiempo. Damon Lindelof abraza el absurdo en un mundo que lo abrazó antes que él, montando una guerra entre espiritualidad y algoritmos que no tiene miedo al humor chorra y las referencias meta. Hay pocas series ahora mismo como esta movida de una monja y un cowboy en motocicleta buscando el Santo grial para una Inteligencia Artificial, por no decir ninguna. Bravo Damon por seguir refrescando qué puede hacer la televisión y seguir dando su turra sobre fe en un mundo desquebrajado.
12. The Architect (S01)
El mercado del alquiler es tan demencial que hace una distopía sobre el mismo se acerca más al realismo social que a la ciencia ficción. Aun así, bravo por esta serie noruega por encontrar el perfecto grado de humor en medio de un asunto que de gracia tiene poca. Su tono narrativo parece tener tanto de Succession como de Lars Von Trier, lo cuál va de maravilla para intentar explorar el mundo del urbanismo y la arquitectura. Tan demoledora como bizarra, una exquisitez.
11. Poquita fe (S01)
De lo mejor en la categoría de comedias españolas recientes de "reír por no llorar o morirse de la vergüenza". Pepón Montero y Jaun Maidagán crean un perfecto retrato costumbrista sobre la apatía moderna y sobre lo imposible que se hace vivir cuando el contexto se va volviendo cada vez más precario. Su grandísima estructura y montaje dan una frescura impagable a chistes bastante familiares, y el combo de Raúl Cimas y Esperanza Pedreño ofrecen esa clase de personajes tan reales que duelen.
10. La Tierra según Philomena Cunk (S01)
Que Charlie Brooker sea creador resulta casi circunstancial, aunque puede ser lo mejor que ha entregado desde que se dejó bañar por los billetes de Netflix. Alejado del impactante neoludismo de Black Mirror y más cerca de sus especiales del año de José Mota (A la mierda el 2020/2021) aunque con más acierto, hace un Érase la vez la Tierra a través de un personaje iletrado plenamente convencido de estar en lo cierto (un poco la cuenta de Twitter del tío de las pinzas en mujer presentadora) bien llevado por Diane Morgan.
Se puede decir que sus cinco episodios gastan un poco la misma carta, pero resulta siempre divertida porque mira la historia con un revisionismo bien redirigido hacia la coña mordaz, parodiando con mucho éxito las docuseries históricas. Y si eso falla, siempre está lo chorra, como el chiste recurrente con Technotronic que siempre sorprende y siempre funciona. Como buena comedia british, es efímera y probablemente no volvamos a oír algo nuevo de ella en un par de años (o cinco), pero entra estupendamente.
9. La mesías (S01)
Los Fabelman, Mommy y Canino todo bien mezclado en una coctelera donde Los Javis no pueden resistirse tampoco a las tendencias misicas (aunque les cueste el final). Pero se perdona, porque el viaje que realizan en el proceso es apasionante, haciendo el mejor uso de lenguaje audiovisual en España este año. Momentos de intento terror, aunque nunca caigan del todo en el género, a través de uno de los personajes más escalofriantes que una serie se ha atrevido a retratar recientemente. Ni Dahmer ni leches, quien más te dejará hecho un destrozo es quien más asegura quererte. Menudo rosario de la Aurora.